Campaña 2014: "Animados por Francisco, coronemos en nuestro hogar a María Reina de las Familias"

En este nuevo año, la Iglesia toda festeja el primer año de Pontificado del Papa Francisco. Una gran bendición del Señor y nuestra Madre que un hijo de esta tierra latinoamericana sea hoy el Vicario de su Iglesia. Como católicos debemos agradecer por este inmenso regalo y rezar mucho por el: por su salud, por sus intenciones y por su inmensa misión.

Desde este humilde sitio, hoy los invitamos nuevamente a que realicemos en nuestro hogar un signo muy fuerte y significativo, ideal para empezar a caminar como Pueblo de Dios esta Cuaresma. Invitamos a las familias a realizar, quienes no lo han hecho aún, o a renovar quienes ya lo realizaron, la Coronación de la imagen de la Santísima Virgen María como Reina de la Familia. 

Les recuerdo que cuando nuestro Papa Francisco era el Cardenal Primado de la Argentina, habiéndose enterado vía email de este apostolado, nos dijo: 

"Muchas gracias por su correo que me ha consolado y alegrado. Sigan adelante con fervor en este apostolado. Le pido, por favor, que rece y haga rezar por mí. Que Jesús lo bendiga y la Virgen Santa lo cuide."

¿Como no dar a estas palabras ahora una relevancia mayor? Nuestro Papa nos pide que sigamos adelante con este apostolado. Es decir, que en todas las familias Reine el Inmaculado Corazón de María, pues nadie mejor que Ella, hará reinar en nuestros hogares y familias al Rey de la Gloria, a su amadísimo Hijo Jesucristo.

¿Como realizar este piadoso acto? 

Muy fácil y sencillo como nuestra humilde Madre. Realizaremos una pequeña corona que se ajuste a la cabecita de la imagen de la Virgen María que tengamos en nuestro hogar. La corona puede ser del material que uno pueda o quiera: perlas, puntilla, tela, flores, fantasía, metal, etc. Ya el Espíritu Santo nos inspirará lo que podamos realizar. Y si uno no se anima a realizarla puede pedirle a otro que la construya. Lo importante es que un día especialmente elegido (puede ser una Fiesta del Señor o de la Virgen, o un sábado que tradicionalmente se dedica a María, el 24 de marzo, el día de Pascua, etc.) la familia se reúna, rece el Rosario y haga una oración de consagración a Jesús en las manos de María. En este enlace pueden ver un ejemplo de como realizar una corona de perlas, y en este otro enlace pueden ver nuestra propuesta de oración para realizar el acto. Esa imagen de la Virgen Coronada será desde ese momento, el signo tangible que nos recordará nuestra pertenencia al Señor y que siendo como somos hijos de Dios por el Bautismo, nos atrevamos a vivir como tales.
Desagraviar las ofensas a Dios y a la Virgen

Este acto, como toda oración que podamos hacer a Nuestra Madre, podemos hacerlo también con la intención de desagraviar las ofensas que se hacen por todo el mundo contra el Inmaculado Corazón de María. Ya se lo explicaba Jesús mismo a Sor Lucía cuando le daba las razones de la Devoción de los Cinco Primeros Sábados: ofensas a su Inmaculada Concepción, a su Virginidad perpetua, a su Maternidad Divina, ofensas a su Corazón por los que inculcan en los niños el desprecio a su Santísima Madre y por los que la ofenden agraviando sus imágenes.

Será de mucho consuelo y alegría al Corazón Inmaculado de la Santísima Virgen María el ver que sus hijos, cumpliendo la profecía de su Magnificat de llamarla Bienaventurada (Lucas 1,48), la reconozcan además como Reina de sus familias coronando devótamente sus imágenes. Y también será de gran consuelo al Sagrado Corazón de Jesús de ver que sus hijos y hermanos aman a su Madre bendita con su mismo amor, aliviando el dolor los clavos de nuestros pecados de su Corona de espinas por coronas de Reina en la cabeza de su Madre. El Señor coronó a su Madre como Reina de todo lo creado (Apocalipsis 12,1), es justo que todos sus hijos hagamos lo mismo.

"Sigan adelante con fervor este apostolado"

Animados por la invitación del Papa cuando era Cardenal, los animamos hoy a ustedes a realizar con fervor y entusiasmo este filial acto de amor a Nuestra Santísima Madre. También los invitamos a hacerse apóstoles de esta iniciativa reenviando este email a sus contactos, a replicarlo en Blogs y sitios web, a publicar la invitación en las Redes Sociales como Facebook y Twitter, incluso a imprimirlo y hacer fotocopias y regalar. ¡Que Santa María Reine en todas las familias! ¡Es necesario! ¡Es urgente! ¡Hemos dejado que el mundo se meta y rompa la unidad y el amor de las familias, de los esposos, la santidad de los hijos, del matrimonio! ¡Basta! ¡Que DIOS REINE en nuestras vidas! ¡Que todos los hombres se salven! Eso quiere el Señor. Eso desea María y nos ayuda con su presencia maternal.

Que el Señor los bendiga y la Virgen Santa les sonría. Y por supuesto, no olvidemos rezar y hacer rezar por el querido Papa Francisco.

Mas información

http://coronaciondelavirgen.blogspot.com.ar/

http://www.mariamadrededios.com.ar/entrenos/Coronacion/castellano/coronacion_1.asp

http://www.mariamadrededios.com.ar

http://www.lumenfidei.com.ar/p/coronacion.html

Cómo comenzó esta devoción de Coronar la imagen de la Virgen en los hogares

A principios del año 2009, se me empezó a ocurrir que seria muy bonito que las familias coronaran las imágenes de la Virgen maría que hay en sus casas. La Iglesia siempre ha coronado las imágenes de María, sobre todo en las advocaciones importantes y significativas. Demás está decir que es un acto que emula al de Dios. Pues el primero que coronó a María es Dios cuando al ser asunta la Virgen al Cielo en Cuerpo y Alma, la coronó como Reina y Señora de todo lo creado, tal como rezamos en el quinto misterio de Gloria del Rosario. Yo pensaba que si las familias la coronan solemnemente en la intimidad de su hogar y se consagran sus miembros al Inmaculado Corazón, esto sería de gran bendición para todos y además alegraría profundamente el Corazón de María, muchas veces tan dolido por la perdición de tantos hijos en las manos del mal.

En esos dias me llamó por teléfono un gran amigo mío, el Señor Giorgio Sernani, gran hijo de María y gran conocedor de la Mariología Católica, escritor de muchos libros sobre la Virgen María. Había yo comenzado a escribir sobre la Devoción de Coronación y aún no lo concluía. Yo le iba a comentar sobre eso, pensando que quizá no le interesaría, cuando el me comienza a decir que un Sacerdote había asistido a la familia de una de sus hijas coronando una imagen de María en su hogar y que el había tenido una idea. Me di cuenta inmediatamente que ambos habíamos tenido la misma inspiración y lo interrumpí diciéndole que no me contara nada hasta que yo le escribiera. Así fue que nació esta Devoción. Yo escribí y diseñé el folleto básico para distribuir a los fieles y Giorgio escribió toda la fundamentación de dicho acto piadoso. El 13 de mayo de 2009 lo hicimos público a través de internet en mi sitio webwww.mariamadrededios.com.ar. Se enviaron emails a una gran lista de suscriptores del sitio y la Devoción comenzó a propagarse por el mundo. Ese mismo día coronamos en mi casa nuestra imagen de la Virgen con una corona hecha por mi esposa Carina. Unos meses más adelante ideé el nombre de la Campaña y el logo: "Una corona para mi MADRE, una REINA para mi familia".

Vestida de Sol, de Giorgio Sernani

Coronación de la Virgen Santísima en los hogares

“Jesús es el Rey de los siglos eternos por naturaleza y por conquista; y por Él, con Él, subordinada a Él, María es Reina por gracia, por parentesco divino, por conquista, por singular elección. Y su reino es inmenso, como el de su Hijo y Dios, pues que de su dominio nada queda excluido.


Por eso la Iglesia la aclama Reina de los cielos y de la tierra, gloriosa, dignísima, Reina del Universo, Regina de los Cielos, gloriosa y dignísima Reina del mundo; y nos exhorta a invocarla día y noche entre gemidos y lágrimas de que está lleno este destierro:


“Salve, Reina y Madre de misericordia; vida, dulzura, esperanza nuestra. Ésta su realeza es esencialmente maternal, exclusivamente benéfica” (Pío XII, Radiomensaje a las solemnidades de Fátima, 13 de mayo de 1946) que mueve también a la Iglesia a rogarle “como Reina de los Ángeles y de los santos, de los patriarcas y de los profetas, de los apóstoles y de los mártires, de los confesores y de las vírgenes, de todos los santos”. (Ibid) Y también Reina de la Paz.


Éstos son algunos de los nombres que integran las seculares Letanías Lauretanas, que muchos, desde siglos rezan luego del Santo Rosario en Familia. Los enumera Pío XII, que podríamos decir fue el Papa de la Realeza de María.


Y bien, Juan Pablo II, ante la avalancha de males que atacan la sagrada institución familiar, nos indica recurrir a la Virgen para defenderla. Y por eso mandó incluir en esas Letanías la invocación Reina de la Familia.


María es Reina de la familia cristiana. La Virgen Madre de Dios es coronada como Madre y Reina de ciudades y regiones, de la misma manera que ciudades y regiones se han consagrado a su Corazón Inmaculado, haciéndose eco de sus pedidos de Fátima: “Dios quiere establecer en el mundo la devoción a mi Corazón Inmaculado, a quienes la abracen prometo la salvación y que sus almas serán queridas por Dios como flores puestas por mí para adornar su Trono” (Palabras de la Virgen en Fátima, el 13 de junio de 1917, cuando mostró su Corazón Inmaculado)


Consagración y coronación van unidas estrechamente en nuestra vida espiritual. Porque si nos consagramos totalmente a Ella, a su Corazón, la hemos proclamado Reina del mismo, valiendo eso mismo para nuestras familias y hogares. La coronación que se nos propone realizar, debe ser el fruto de nuestra consagración personal y familiar, y se realiza para exteriorizar una realidad interior, para recordar esa consagración de continuo de modo que nos ayude a vivirla, que es lo más importante.